La torsión testicular es un evento poco frecuente caracterizada por la rotación de un testículo alrededor de su cordón testicular, del que en cierto modo “cuelga”. Esta torsión del cordón, causa la interrupción del suministro de sangre y necrosis si el tratamiento se retrasa.
Puede ocurrir a cualquier edad aunque es más común durante la infancia y la adolescencia y la incidencia disminuye lentamente con la edad. La torsión testicular generalmente se presenta como dolor intenso y repentino seguido por hinchazón testicular y enrojecimiento de la piel del escroto. También pueden aparecer otros síntomas como dolor abdominal, náuseas y vómitos.
El tratamiento quirúrgico incluye la reposición del testículo en su posición anatómica o, caso de que este se haya necrosado, la extirpación u orquiectomía,
A pesar de que el diagnóstico y el tratamiento son sencillos en la mayoría de los casos de torsión testicular, la etiología es aún controvertida :
- Un músculo cremaster (encargado del descenso y ascenso testicular) hiperactivo, lo que supuestamente podría empeorar por el frío.
- la falta de fijación normal de una parte apropiada del testículo y del epidídimo a las capas fasciales y musculares dentro del escroto.
- los traumatismos,
- el ejercicio.
Un hecho que apoya la hipótesis de la hiperactvidad del músculo cremaster es se produce un claro incremento en los ingresos hospitalarios para el tratamiento quirúrgico de la torsión testicular durante los meses más fríos del año. En este escenario, en lugares con condiciones climáticas extremas, donde la temperatura interior / exterior tienden a variar más, pueden darse las circunstancias para una mayor actividad del músculo cremaster.